Errores más frecuentes cometidos, soluciones y ejercicios auxiliares

Además, produce falta de reacción frente a obstáculos lejanos

Progresar fijando la vista en un punto a mayor distancia.
Realizar el ejercicio sin bastones para evitar elementos de distracción.

1.1 Por un terreno llano, sin obstáculos y con traza bien marcada, dirigirse hacia un compañero que está con la mano levantada a unos cincuenta metros. Cuando el compañero baja la mano hay que pararse para no perder. Si se consigue llegar al compañero se ha ganado.

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Normalmente este error se da cuando no hay traza o ésta es poco consistente.

Por tanto debemos acostumbrarnos a llevarlos paralelos, haciéndolo circular por una traza bien marcada.
Encontramos también este defecto en esquiadores avanzados, en cuyo caso el error suele estar muy afianzado.

2.1 Avanzar sin bastones por una traza, concentrándose en deslizar los esquís de forma paralela.
2.2 Avanzar sin bastones por un terreno en donde el esquí deje huella, concentrándose en deslizar los esquís de forma paralela. Al cabo de treinta metros se detiene y se evalúa la traza dibujada.
2.3 El ejercicio 2.2 con autoevaluación.

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Es un error natural, pues al andar levantamos el pie, pero que sobre los esquís es un movimiento inútil e ineficaz. Por regla general, este error va acompañado de una posición excesivamente erguida del tronco.

Suele ir acompañado de trazas convergentes o divergentes por lo que debemos comprobar si también existe el error 2.
Debemos razonar sobre el peso inútil que levantamos en cada paso y la consiguiente pérdida de eficacia del movimiento. Suele ser un error relativamente fácil de corregir

3.1 Avanzar sin bastones sobre una traza concentrándonos en deslizar los esquís de forma paralela y sin levantar la espátula
3.2 Igual que 3.1 pero con bastones

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Es otro defecto muy común. Al avanzar se produce un desequilibrio que obliga a llevar los brazos abiertos para compensarlo, clavando los bastones a 40-50 cm de la traza.

La marcha va acompañada de un balanceo de la parte superior del cuerpo y los bastones adquieren un papel equilibrador y no impulsor.
Es frecuente encontrar al realizar una travesía, trazas de base muy estrecha que favorecen esta posición. La búsqueda de la postura correcta suele llevar a la solución del problema

4.1 Pedimos a un compañero que se coloque con los esquís muy juntos y pedimos a otro que le dé un empujón lateral. El se tabaleará, pero retomará el equilibrio colocando los esquís en base ancha. Volvemos a empujar, y veremos que en la posición de equilibrio podemos absorber el empujón. El ejercicio puede ,hacerse al pero existe el riesgo de caída y posible lesión.
4..2 Avanzamos sin bastones, y nosotros mismos veremos que al no tener elementos equilibradores, buscaremos una base más ancha.
4.3 Una vez realizado 4.2 progresaremos sobre terreno llano por donde los esquís dejen huella. A continuación evaluaremos la traza dejada por los esquís y los bastones.

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Además, la extensión del antebrazo también es insuficiente. Aferramos la empuñadura del bastón durante la impulsión en lugar de relajar los dedos de la mano transmitiendo la impulsión sobre la dragonera.

Los bastones deben clavarse con los antebrazos en semiflexión para aprovechar el impulso del tronco y realizar una suave impulsión llevando el brazo hacia atrás y estirando el antebrazo de forma proporcional a la zancada.
Este error suele ir acompañado de una posición de tronco muy erguida y/o de un paso muy corto. También puede ser producido por un palo muy largo, o por coger mal el palo.

5.1 Avanzar a un paso rítmico con los brazos estirados y relajados y los bastones cogidos por el centro de gravedad de los mismos.
5.2 Avanzar concentrándose en estirar más el antebrazo.

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Clavamos la punta demasiado adelantada (oblicuamente por delante de las manos) y suele ir acompañado de un balanceo de hombros cuando el palo pasa bajo la vertical del cuerpo.

Deberemos intentar razonar la inutilidad de este movimiento, y comprobar que empuñamos correctamente el bastón y mejorar la posición del tronco

6.1 Progresar de manera correcta. Concentrarnos en la posición de los bastones

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Suele deberse a llevar el bastón demasiado largo

Comprobar que los bastones no son excesivamente largos y que no existe el error 4.Intentar comprender la pérdida de eficacia del movimiento.

7.1 Progresar mientras nos concentramos en la posición de los bastones. Al cabo de unos veinte pasos, evaluar la situación de las huellas de las rosetas de los bastones.