¿Casteret? ¿Qué es eso?
Mucha gente ignora de dónde proviene el nombre de la empresa, Casteret Guías. Pues en este artículo vamos a resolver las dudas (aunque la mayoria de los montañeros experimentados lo saben, ya que han visitado la entrada de la cueva que lleva su nombre, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido)
En efecto, si una cueva lleva su nombre, es porque fue un avezado explorador y famoso espeleólogo, aventurero y escritor francés. Norbert Casteret (19 de agosto de 1897 – 20 de julio de 1987), es uno de los exploradores más reconocidos en el mundo de la espeleología. Casteret fue una destacadísima figura de la espeleología francesa a mediados del siglo XX.
Casteret fue un deportista polifacético y un gran alpinista, que empezó a practicar espeleología en 1912.
Casteret sirvió en la infantería francesa durante tres años durante la Primera Guerra Mundial, de donde conservó el casco y la lámpara que utilizó en las trincheras para usarlos más adelante en la espeleología.
Sus hazañas
La fama de Casteret comenzó con una audaz inmersión en apnea en la Grotte de Montespan (Francia) en 1923, que llevó al descubrimiento de pinturas rupestres prehistóricas.
Seguidamente realizó muchas exploraciones importantes, incluidas las cuevas de Marboré, (Grotte Casteret, en 1926, la Grotte de Labastide en 1931, Cigalère en 1931, Gouffre Martel, −303 metros, en 1933, Henne Morte, −446 metros, en 1947, y el Gouffre de la Pierre Saint Martin, −689 metros, en 1952-3)
Entre los "padres de la espeleología moderna", Norbert Casteret es recordado como uno de los primeros en cruzar los umbrales de agua que separan complejos sistemas de cuevas y lagos subterráneos y en profundizar cada vez más de cueva en cueva.
Casteret continuó explorando cuevas durante muchos años de su vida, relatando sus experiencias en más de 40 libros, además de conferencias y numerosos artículos.
Élisabeth CASTERET
(13 de mayo de 1905 París / 6 de mayo de 1940 Saint Gaudens, Alto Garona)
En 1924, Norbert CASTERET conoció a su futura esposa, Élisabeth, nacida en 1905; hija de un médico que pretendía estudiar medicina, pero que no continuó sus estudios tras su matrimonio celebrado el 30 de diciembre del mismo año.
En palabras de Norbert, “Nunca antes había entrado en una cueva, pero era una excelente alpinista y ya había escalado varias cimas de los Pirineos en el macizo de Bagnères-de-Luchon. Yo, por mi parte, nunca había hecho ninguna escalada, pero, como sabemos, era un fanático de las cavernas. Sin embargo, esta flagrante contradicción no implicaba ninguna incompatibilidad. La solución, lo ideal, hubiera sido que yo buscara cuevas y simas en las altas montañas y que mi esposa las explorara conmigo. Al montañismo, con la ayuda de los dioses, esto fue precisamente lo que sucedió“.
Élisabeth no sólo fue la compañera de Norbert Casteret y la madre de sus cinco hijos (Gilberte, Raoul, Maud, Raymonde, Marie), sino que también fue una alpinista experimentada. Con apenas 19 años, ya había escalado varios de los picos más altos de los Pirineos y era natural que compartiera su pasión con su marido, llevándolo a la “Brèche de Roland” sobre el “Circo de Gavarnie”.
Allí descubrirán juntos la cueva helada más alta jamás descubierta. Norbert Casteret también había arrastrado a su esposa a la clandestinidad y ella se había convertido en su compañera constante, en los Pirineos pero también en el norte de África. Se convirtió así en la primera mujer espeleóloga, alcanzando, por ejemplo, los 303 m en el “Gouffre Martel” de Ariège: ¡era entonces la cavidad más profunda de Francia! También participó en el descubrimiento del verdadero nacimiento del Garona.
Lamentablemente, Élisabeth murió el 6 de mayo de 1940 de fiebre puerperal, pocos días después del nacimiento de su hija menor.