Raquetas de nieve en el Valle de Ordesa (Torla)
El paraje más emblemático y visitado del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, así como uno de los primeros espacios protegidos de Europa, creado en 1918. En pleno corazón del Pirineo Aragonés, además está reconocido como Patrimonio de la Humanidad y guarda una biodiversidad de valor incalculable.
El 16 de agosto de 1918 el fondo del valle de Ordesa era declarado Parque Nacional, garantizando la conservación de 2.066 hectáreas de un paisaje repleto de vida en los confines del legendario Sobrarbe aragonés, en el corazón del Pirineo.
En 1982, el Parque fue reclasificado para incorporar el cañón de Añisclo, la garganta de Escuaín, el circo de Pineta y el macizo de Monte Perdido, alcanzando así las 15.608 hectáreas del actual Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Un impresionante paisaje glaciar
El Valle de Ordesa propiamente dicho es un espectacular valle glaciar, con marcada forma de «U», situado al suroeste del Macizo del Monte Perdido, por cuyo fondo fluye el río Arazas en una continua sucesión de bellas cascadas. Desde la que inicia el valle, en el Circo de Soaso, conocida como la «Cola de Caballo», pasando por las Gradas de Soaso, una sucesión de múltiples cascadas escalonadas, hasta las cascadas del Estrecho y la Cueva, enormes saltos de agua horadados en la roca caliza.
En las paredes verticales del valle, producidas por el trabajo del hielo y la roca en la diferente dureza de las capas rocosas, se abren varias «fajas», pequeñas cornisas horizontales que permiten recorrer el valle en altura por vertiginosas y estrechas sendas, inaccesibles en invierno. Por eso nuestro paseo con raquetas de nieve se realiza en el fondo del valle.
¿Quieres más información o contratarnos para esquí de montaña, raquetas de nieve o alpinismo invernal?