Ascendimos al Pico Foratulas con esquí de montaña, un nuevo clásico del Balneario de Panticosa, pero rodeándolos, en lugar de subir por la ruta más utilizada (la llamada “nevera de los Foratulas”), esta vez los rodeamos y pasamos por el collado entre ambos Foratulas, es decir, su cara sur.
Se trata de una actividad de enorme belleza y con el añadido de ascender la pequeña canal sur, que nos obliga esta vez a subir con crampones la última parte, aunque otras veces, forzando y realizando “foqueo extremo”, hemos conseguido subir hasta el collado con esquís. Tras valorar ambas cimas, vemos que sólo la de la derecha es más o menos esquiable (esta vez falta nieve en las cumbres), así que allí subimos. Descenderemos esta vez hacia la nevera del Foratulas, y después giraremos ligeramente a la izquiera a buscar el bosque llamado descenso de la embotelladora del Balneario de Panticosa. En esta ocasión nos tocó usar de todo, incluso crampones y piolet para la pala que nos deja entre ambos picos. Descendimos por el tubo de nos deja directamente en la Nevera de los Foratulas para después acceder al bosque.
Siempre un lugar espectacular el Balneario de Panticosa. Con nuestros amigos del Refugio Casa de Piedra.